Incendio Forestal, es aquel fuego no deseado de cualquier origen, que no es estructural, que se propaga sin control en los recursos forestales, causando dańos ecológicos, económicos y sociales (SERFOR, 2017) y que es uno de los principales desastres antrópicos en el Perú. A pesar de no ser tan frecuente en el país, como en latitudes medias, dańa numerosas áreas forestales, incluyendo terrenos agrícolas y áreas naturales protegidas, y a su vez genera efectos negativos en la flora y fauna, y salud de las personas, ya que los ecosistemas peruanos no se encuentran adaptados al fuego.
Para que se produzca un incendio forestal se necesitan tres elementos: calor, oxígeno y combustible (material vegetal vivo o muerto); que coincidan en un lugar y tiempo determinado. Estos elementos están altamente relacionados con los factores meteorológicos (temperatura, humedad del aire, precipitación y viento) y físicos (tipo de vegetación, topografía, humedad del suelo, etc.) de la región donde ocurre el incendio forestal.
El SENAMHI realiza vigilancia y monitoreo continuo del comportamiento de variables atmosféricas favorables a la propagación de un incendio forestal en el Perú. Estas variables monitoreadas son: temperatura máxima, precipitación diaria, humedad relativa al mediodía y cantidad de días continuos sin lluvia. También SENAMHI monitorea el Índice Atmosférico de Incendios Forestales o Fire Weather Index (FWI), brindando así un pronóstico de las áreas mas propensas al peligro de incendios forestales.